Exprime al máximo tu dispositivo NAS

Tu disco NAS sirve para mucho más que almacenar archivos. Extiende sus funciones y disfruta de servicios que van más allá de los clásicos FTP o las soluciones web.

Nivel: Intermedio

Synology comercializa algunos de los mejores NAS que puedes instalar en tu red doméstica, pequeña oficina o empresa. Y es que presume de una de las mejores relacionesprecio/prestaciones del mercado, además de que su consumo energético es uno de los más bajos y su funcionamiento 24 x 7, imbatible. De hecho, lo que mostramos a continuación es el resultado de nuestra experiencia en el uso de uno de estos dispositivos durante más de siete años de funcionamiento sin interrupciones (un Synology 409 Slim), deteniéndonos en algunas de las características que os recomendamos utilizar. Además, muchas de ellas también están disponibles en dispositivos NAS de QNAP, solo deberéis de acceder a las opciones de configuración equivalentes en esta firma.
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La configuración óptima

Los NAS son pequeños ordenadores afinados para tareas de almacenamiento que cuentan con su propio sistema operativo (variantes de Linux) y software de gestión vía web. En el caso de Synology, este software se denomina DSM (actualmente va por la versión 4.1), al que el fabricante se refiere como su firmware. Prácticamente, todos los modelos NAS (Network Attached Storage) interesantes son los que permiten instalar un mínimo de dos discos duros, garantizando la réplica de los datos almacenados; y aún más interesantes son aquellos que cuentan con un mínimo de cuatro ranuras y que, por ello, facilitan añadir más capacidad de almacenamiento.

Como en cualquier otro dispositivo, se pueden utilizar diferentes niveles de configuración RAID. Sin embargo, nuestro consejo es que te olvides de ello, pues son configuraciones rígidas y que, en el momento en el que se producen fallos de estructura o de discos, probablemente se conviertan en un verdadero dolor de cabeza para que todo vuelva a funcionar correctamente.

En vez de los rígidos niveles RAID convencionales, te recomendamos que utilices el asistente de creación de volúmenes integrado para crear uno, denominado Synology Hybrid RAID (SHR). Esta tecnología optimiza al máximo la capacidad de los discos utilizados y también ofrece una tolerancia de fallos de uno a dos discos para la protección de datos. Has de tener en cuenta, no obstante, que cuantos más discos dediques a dicha función, menor será la capacidad de almacenamiento real disponible. Puedes ver un ejemplo en la web de Synology. Antes de que tomes tu decisión, es interesante que hagas los cálculos. En nuestra opinión, el uso de un disco para la tolerancia a fallos es probablemente más que suficiente.

1. Administrador

Para crear una de estas configuraciones, accede con el navegador a la dirección IP del NAS. A continuación y una vez identificado con las credenciales de usuario administrador, dirígete al menú situado en la esquina superior izquierda y selecciona el icono Administrador de almacenamiento.

Cuando lo hagas, se abrirá una ventana en la que, inicialmente, no verás ningún volumen creado. Si ya se hubiese creado uno y quisieras reconvertirlo al formato SHR, debes pulsar sobre Quitar, teniendo en cuenta que, tras la confirmación, se borrarán todos los datos contenidos en los discos (es muy recomendable contar con una copia de seguridad sobre un disco externo).

2. Crea un volumen SHR

Para crear un volumen de las características descritas, asegúrate de seleccionar la pestañaVolumen. A continuación, pulsa sobre el botón Crear (es preciso que el NAS cuente, como mínimo, con un disco duro sin inicializar). Dicha acción dará paso al Asistente de configuración. Deja marcada la opción por defecto, Rápido, en la que se aplica la creación de un volumen SHR. Ten en cuenta que la capacidad de almacenamiento dedicada a la protección de datos dependerá de la cantidad de discos instalados.

Una vez completado el formateo, ya tendrás el volumen listo para usar, con la ventaja de que a partir de ese momento podrás aumentar la capacidad con solo insertar un nuevo disco en el NAS y asignarlo al volumen.

3. Accede desde cualquier sitio

Muchos de los servicios proporcionados por el NAS tienen sentido dentro de la red local, donde el dispositivo es visible gracias a la dirección IP asignada por el enrutador del domicilio u oficina; y que probablemente sea el mismo utilizado para proporcionar el acceso de banda ancha. Pero, para muchas otras cosas, es preciso acceder al dispositivo desde cualquier parte en la que se disponga de conexión a Internet. Esto es algo que facilitan los servicios DDNS (muchos de ellos gratuitos) y que se encargan de mantener sincronizado el nombre de tipo URL elegido por nosotros (como por ejemplo miSynology.dyndns.org) con la dirección IP externa del enrutador que utilicemos (la asignada por el proveedor de banda ancha cada vez que se enciende el dispositivo, y que varía a no ser que se pague un suplemento).

Bien, para que todo funcione correctamente, asegúrate de acceder al software DSM de tu Synology, selecciona Panel de Control en el menú principal y, a continuación, la entrada correspondiente a Ez Cloud bajo el epígrafe Servicios de Red. Selecciona después la pestaña DDNS, activa la casilla de verificación Habilitar compatibilidad con DDNS y rellena a continuación los datos correspondientes a la cuenta creada en cualquiera de los servicios soportados (DynDNS, No-IP o la propia Synology, etc.).

Crea tu propio Dropbox

Dropbox es un servicio excelente, pero ¿sabías que puedes hacer algo similar con tu Synology? Esto es lo que se obtiene con la característica Cloud Station. Solo has de seleccionar una carpeta en el volumen del NAS (la que actuará como almacenamiento en la Nube) y cuyos archivos se mantendrán sincronizados en los equipos clientes (Windows y OS X) sobre los que instalemos el software correspondiente. Incluso cuando los equipos cliente editen los archivos de su carpeta Cloud Station local sin que se disponga de conexión a Internet, estos sesincronizarán automáticamente una vez que la máquina vuelva a disponer de conexión.

4. Instala Cloud Station

Accede al software de gestión DSM del NAS Synology DiskStation introduciendo la dirección IP en el navegador. Inicia sesión con las credenciales de usuario administrador. Una vez en la pantalla de gestión, haz doble clic sobre Centro de Paquetes. Este es el apartado que permite ampliar las capacidades de la unidad mediante la instalación de los módulos de software desarrollados por terceros y la propia Synology. Es muy recomendable visitarlo de cuando en cuando, puesto que la cantidad y tipo de soluciones disponibles se actualiza con frecuencia.

Navega por la ventana del Centro de Paquetes hasta la entrada Cloud Station y pulsa sobre Instalar. Al hacerlo, se iniciará el proceso, con la ventaja de que no se interrumpirá ninguno de los servicios del NAS. Una vez finalizado, encontrarás el paquete bajo la pestaña Instalado de la ventana Centro de Paquetes. Es recomendable visitar este área de vez en cuando, puesto que aquí es donde se pueden aplicar las actualizaciones para los servicios instalados.

5. La configuración

Al salir del centro de paquetes, selecciona el menú principal en la esquina superior izquierda del DSM donde encontrarás la nueva entrada correspondiente a Cloud Station. Selecciónala y se abrirá la ventana de configuración del servicio. Marca la casilla Habilitar Cloud Station para activar el servicio. A continuación, en el caso de que aun no esté configurado, pulsa sobreConfiguración de QuickConnect. Dicha acción abrirá una nueva ventana de configuración. Aquí ha de marcarse la casilla correspondiente a Cloud Station. Una vez hecho, ya se puede cerrar la ventana y volver a seleccionar la correspondiente a Cloud Station. Ahora, verás un número asociado a la entrada ID de Quick-Connect. Apúntalo, pues es el que deberás introducir en cada uno de los equipos clientes cuyos archivos quieras mantener sincronizados.

Lo que hemos hecho mediante QuickConnect ha sido evitar todo el engorro de tener que crear reglas en el enrutador de tu domicilio (u oficina) para el envío y recepción de archivos desde y hacia el NAS.

Para decidir cuáles son las carpetas compartidas que se sincronizarán, selecciona Compartir. En el listado, solo has de marcar la casilla de verificación asociada a cada una de las entradas, teniendo en cuenta que las carpetas elegidas no pueden estar encriptadas. Por último, enPrivilegios, podrás decidir cuáles de los usuarios creados en el NAS podrán acceder a esta capacidad.

6. Instalación en los equipos cliente

Para finalizar, queda por instalar el software cliente en cada uno de los equipos donde desees mantener los archivos sincronizados. Dirígete a www.synology.es y elije la entrada de menú Soporte/Centro de descarga. A continuación, deberás indicar el modelo del NAS y, en la página resultante, descarga Cloud Station (para Windows y/o Mac OS X).

Una vez instalado, se abrirá el asistente de configuración. Aquí es donde, en la segunda pantalla, deberás introducir el ID de QuickConnect apuntado en el paso anterior. Una vez se haya comprobado la conexión, si tienes algún problema, consulta el recuadro Accede desde cualquier sitio, de modo que puedas escoger el nombre con el que quedará registrado el equipo, así como la ruta de destino para la carpeta local. Eso sí, los valores por omisión son suficientemente buenos.

Cuando haya finalizado el asistente, encontrarás sincronizados los archivos remotos, listos para usar, en su nueva carpeta CloudStation. Y recuerda que cualquier nuevo archivo que se añada aquí también se sincronizará con el NAS Synology y el resto de los clientes.

Como valor añadido, cada uno de los archivos sincronizados conservará un total de 30 versiones, de modo que puedas volver a ellas siempre que lo necesites. La limitación más severa es que el tamaño máximo de los archivos sincronizados no puede exceder los 5 Gbytes.

7. Más que acceso a los archivos

Por omisión, todos los NAS Synology disponen del servicio FileStation. Se trata de la capacidad de utilizar el navegador para acceder mediante cualquiera de las cuentas de usuario creadas en el dispositivo, y a las que se les haya dotado de los correspondientes privilegios para acceder y gestionar desde cualquier lugar los archivos almacenados en el NAS.

Las opciones disponibles son muy completas y no solo se podrá descargar al equipo los archivos almacenados en los volúmenes compartidos del NAS para los que se tenga acceso, sino que también será posible cargar otros nuevos, montar la carpeta como remota, comprimir o descomprimir y crear enlaces de acceso directo. Estos pueden ser compartidos con cualquier persona, sin que ni siquiera sea preciso que disponga de una cuenta de usuario creada en el Synology. Además, durante la creación de este tipo de enlaces, es posible indicar un periodo de validez. Realmente útil para permitir que colegas, amigos y familiares puedan descargar archivos desde nuestro dispositivo con la mínima complicación.

Eso sí, para que funcione, deberás configurar el enrutador para que reenvíe todo el tráfico del puerto 5000 hacia la dirección IP asignada al DiskStation. De igual modo, para que los enlaces tengan un nombre significativo (y puedan utilizarse realmente), activa la funcionalidad de DDNS. Si lo deseas, también puedes hacer que tu Synology actúe como un servidor FTP convencional activándolo desde Panel de control /FTP. En este caso, asegúrate de reenviar el puerto 21 del enrutador hacia la dirección IP asignada al DiskStation. Entre las opciones de configuración, encontrarás las que permiten restringir el ancho de banda tanto de subida como de descarga por conexión, así como el número máximo de conexiones permitidas.

Establece una conexión VPN propia y segura

Las redes inalámbricas WiFi gratuitas son cada vez más ubicuas. Eso implica acceso gratuito a la Web y otros servicios basados en Internet desde el ordenador, tableta o teléfono inteligente. Pero también significa que se corre el riesgo de que cualquier otra persona que esté conectada a la misma red inalámbrica gratuita pueda capturar el tráfico de datos de esa conexión y, por tanto, información sensible.

¿La forma de solucionarlo? Realizar una conexión VPN. Para simplificarlo mucho, es como si dentro de la conexión WiFi general (o de datos 3G o similar) se crease un tubo que conectase el dispositivo de un extremo con un servidor remoto en el que confiamos, de modo que las peticiones entre el dispositivo y el punto remoto viajen de forma segura y a salvo de fisgones. Luego, será el punto remoto quien se encargue de obtener los datos solicitados y devolverlos por el mismo canal.

Pues bien, esto se puede configurar en el Synology. Así, estés donde estés, puedes configurar una conexión VPN en tu ordenador, tableta o teléfono y establecer la conexión segura con el DiskStation. A partir de ahí, será el NAS el que se encargue de utilizar la conexión de banda ancha de tu domicilio (u oficina) para pedir los datos y devolverlos por el mismo canal seguro. También supone el modo seguro de acceder a las carpetas compartidas tanto en el Synology como en el resto de equipos de la red local que proporcionen servicios compartidos.

8. Instala el servidor

Tal y como hicimos en el punto anterior, antes de nada, es preciso instalar el servicio VPN Server desde el Centro de Paquetes. Una vez emplazado, encamina tus pasos hacia las opciones de configuración desde el menú de DSM. En la ventana resultante, selecciona PPTP (el tipo de protocolo de tunelización empleado en la conexión). Habilita el servidor PPTP VPN, e introduce un rango de asignación de dirección IP dinámica (por ejemplo, 129.168.2.0), que serán las repartidas a los clientes conectados.

Limita el número máximo de conexiones para no sobrecargar el sistema, teniendo en cuenta que el valor por omisión está bien. En la opción de autenticación, selecciona MS-CHAP v2, mientras que, para el campo de cifrado, selecciona Require MPPE (40/128 bit). Por último, marca la casilla Utilice DNS manual e introduce la IP correspondiente al router.

9. Los ajustes del enrutador

A continuación, tienes que indicarle al enrutador que todo el tráfico solicitado a través del puertoTCP 1723 (PPTP) sea redirigido al DiskStation. Para ello, tendrás que acceder a la gestión web de ese dispositivo, por lo general vía web, y utilizar las opciones del fabricante para establecer dicha asignación.

En algunos casos, la configuración se realiza en el apartado NAT; en otros, dentro del dedicado aServidores Virtuales o redireccionamiento de puertos. En la mayoría de las ocasiones, solo requiere la selección de uno de los servicios a configurar 5 (PPTP) en un menú desplegable y la introducción manual de la dirección IP a la que ha de enviarse el tráfico (la asignada al DiskStation).

10. Configura el cliente

Dirígete al apartado de configuración VPN de los dispositivos (por ejemplo, en un iPhone está en Ajustes/General/VPN) y añade una nueva conexión. Aquí deberás introducir la dirección IP externa del enrutador, aunque más sencillo consiste en utilizar el dominio registrado mediante un servicio DDNS gratuito. Luego, solo has de asegurarte de que seleccionas el protocolo PPTP e introduce el nombre de cuenta y contraseña correspondiente a cualquiera de los usuarios que, por omisión, tienen privilegios de conexión VPN en la configuración del NAS (esto es algo que se puede cambiar). Puedes dejar el resto de los campos a sus valores por omisión.

A partir de ese momento, siempre que quieras tener una navegación segura, solo tendrás que activar la conexión VPN en el dispositivo cliente y la salida real a Internet se realizará a través del Synology, aunque estés a miles de kilómetros de distancia. n

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