El desarrollo que ha experimentado la informática doméstica desde 1975 es asombroso. Repasa su nacimiento y maduración de la mano de PC Actual.
El primer PC, bautizado por IBM como «modelo 5150», vio la luz en 1981. Sin embargo, este equipo no fue el primer ordenador personal. Los orígenes de la primera computadora diseñada para ser utilizada fuera del entorno profesional se remontan a mediados de los años 70.
Un jovencísimo Bill Gates
En 1975 surgió tímidamente en Estados Unidos el Altair 8800 bajo la forma de un kit pensado para los entusiastas de la microelectrónica. Pero su éxito fue inesperado y, sobre todo, de una proporción con la que no contaban sus creadores. De hecho, esta modesta máquina sembró el germen que desembocó, muy poco después de su lanzamiento, en la fundación de Apple yMicrosoft. La compañía de la manzana fue fundada en abril de 1976 por Steve Jobs, Steve Wozniak y Ronald G. Wayne, que poco después fue sustituido como socio inversor por Mike Markkula. Y Microsoft germinó justo un año antes que Apple, en abril de 1975, de la mano de Bill Gates y Paul Allen.
El segundo hito en el que merece la pena que nos detengamos por su relevancia fue el lanzamiento en 1977 del Apple II, un ordenador personal en toda regla diseñado íntegramente por Wozniak, que recogió el testigo de sus precursores, el Altair 8800 y el Apple I. Este ingenioso dispositivo era ya un ordenador plenamente funcional, fabricado de forma masiva y con una configuración cerrada, que no requería ser ensamblado por el usuario. Su acogida fue enorme, lo que provocó que IBM, que hasta ese momento no había mostrado el más mínimo interés por el mercado doméstico, cambiase de opinión. Los ingenieros de esta última compañía se pusieron a trabajar, y, como hemos mencionado al principio de este artículo, en 1981 nació el primer PC: elIBM 5150, gobernado por un microprocesador 8088 de Intel a 4,77 MHz y equipado tan solo con un máximo de 256 Kbytes de memoria principal. El resto es historia.
El éxito del Apple II provocó que IBM entrase de lleno en el mercado de los ordenadores personales. ¿El resultado? el IBM 5150: el primer PC
El PC madura y nace PC Actual
Estos inicios definieron dos sendas que han tenido una marcada continuidad hasta hace relativamente poco tiempo: el PC de IBM y el resto de compatibles, ligados a una arquitectura de microprocesadores diseñada por Intel, y los equipos de Apple, que unieron su futuro a los chips de Motorola inicialmente, y posteriormente a la arquitectura PowerPC (concebida por IBM, Motorola y la propia Apple). Hasta que, en 2006, los responsables de Apple decidieron abandonar esta arquitectura RISC y apostar por la familia de microprocesadores Core de Intel, con arquitectura x86, que es la misma utilizada desde sus orígenes por los PCs.
PC Actual inició su trayectoria en abril de 1988, coincidiendo con el lanzamiento de los procesadores 80386 de Intel, que marcaron un hito importante de rendimiento y capacidades. Sin embargo, lo más llamativo de aquellos días no fueron los primeros ordenadores de escritorio que comenzaban a utilizar dichos procesadores, sino la aparición de los primeros equipos portátiles (en realidad se trataba de «portables»), como el Compaq Portable III.
Amstrad PPC 640
Este ingenio estaba pertrechado por dos ranuras de expansión de tamaño completo, una unidad de disco duro, una disquetera, un teclado completo y un módem interno de 2.400 baudios. Estos fueron los primeros años en los que convivieron las firmas llegadas del mercado profesional, como Olivetti o la propia IBM, con otras marcas importantes, como Atari, Commodore, Amstrad, Orchid, los suecos Victor (muy reputados), Toshiba, Acer, Tandom, ALR o Investrónica, entre muchas otras compañías.
El mercado crece a toda velocidad
Uno de los ordenadores de referencia en estos primeros años fue el IBM Personal System/2, que venía a imponer una arquitectura cerrada con la intención de conservar la máxima cuota posible de mercado. Destacó especialmente por el uso de su arquitectura Micro Channel, técnicamente superior al bus ISA, si bien serían otras características del sistema, como la disquetera de 3,5 pulgadas de alta densidad, la tarjeta gráfica VGA, las memorias SIMM de 72 pines y los conectores utilizados para el teclado y el ratón, los que se impondrían como estándares de la industria. Dentro de la gama, los que tuvieron una mayor relevancia fueron las series 50 y 70.
Toshiba T1600
Toshiba destacó junto a Compaq por su apuesta en el segmento de los portátiles, cuyos equipos proporcionaban un nivel de rendimiento comparable, incluso, a los PCs de sobremesa. Su proceso de fabricación les permitió alcanzar cotas de potencia muy superiores a las de sus principales rivales. Todo ello, además, ofreciendo una autonomía que permitía utilizar realmente el producto. Uno de los equipos más destacados de la época fue el Toshiba T1600, que utilizaba un procesador 80C286 a 12 MHz con 1 Mbyte de RAM, 20 Mbytes de disco duro y gráficos EGA. Y todo ello con un peso de «solo» 5,44 Kg.
El garaje en el que surgió HP
De entre los equipos de escritorio, uno de los nombres propios en la década de 1990 fue HP con su línea Vectra. Los primeros modelos, dotados de procesadores i80386, destacaban por ofrecer un rendimiento de 20 MHz y gestión rápida de la memoria, con capacidades de ampliación de hasta 16 Mbytes, discos duros de hasta 108 Mbytes y ocho ranuras de ampliación que conferían a sus productos ventajas competitivas en el segmento profesional sobre otros fabricantes.
Y, por fin, llegó la década multimedia
En plena era multimedia nadie podía definir con claridad en qué consistía el fenómeno que se estaba viviendo y que se había asentado sobre las nuevas interfaces gráficas utilizadas por los sistemas operativos del momento. Una cosa era fundamental: todo ordenador que quisiera lucir la etiqueta «multimedia» debía contar con una unidad de CD-ROM capaz de reproducir los contenidos enriquecidos de la época.
«HOY PODEMOS ENCONTRARNOS CON CINTAS QUE PUEDEN ALMACENAR HASTA 250 MBYTES. PERO LAS UNIDADES EXTERNAS REQUIEREN UNA INSTALACIÓN COMPLICADA Y SON MÁS COSTOSAS» (ABRIL DE 1989 - PC ACTUAL)
Precisamente, este fue el soporte que daría el espaldarazo y serviría de acicate para el despegue de las características, capacidades y posibilidades del almacenamiento óptico. Y, cómo no, también fue el soporte elegido por PC Actual en esa época para comenzar a ofrecer a nuestros lectores todo tipo de aplicaciones, que fueron meticulosamente seleccionadas por nuestros técnicos para ayudaros a sacar el máximo partido a vuestros PCs.
La multimedia con mayúsculas llegaría a los portátiles en torno a 1997, cuando la tecnología ya se encontraba madura para proporcionar equipos con la potencia y calidad gráfica necesarias para la reproducción de estos contenidos sin una merma notable en la autonomía. Las pantallas de matriz pasiva dieron paso a las TFT o de matriz activa con resoluciones de hasta 1.024 x 768 píxeles y profundidad de color de 24 bits. Adicionalmente, mediante el recién estrenado estándar PC Card era posible instalar tarjetas descompresoras MPEG y MPC3. En la segunda mitad del año llegaron los modelos portátiles basados en la tecnología MMX.
Comienza la era de Internet
La importancia de las comunicaciones en los ordenadores personales venía cogiendo fuerza desde los primeros años de la década de los 90, con un gran auge en cuanto a la cantidad de servicios de BBS y dispositivos módem hacia 1994 y 1995. Sin embargo, no fue hasta el segundo tramo de 1996 cuando llegaron al mercado los primeros Network Computer o Web PCs, equipos que reunían unas características de funcionamiento mínimas con precios económicos y pensados desde los cimientos para obtener su funcionalidad mediante la conexión a servidores de archivos y aplicaciones.
LAS TARJETAS DE RED DEJARÍAN DE VERSE COMO UN COMPONENTE QUE SE PODÍA INSTALAR DE FORMA OPCIONAL PARA PASAR A FORMAR PARTE DE LA CONFIGURACIÓN ESTÁNDAR DE CUALQUIER PC.
En España, la segunda encuesta del Estudio General de Medios y Arroba System indicó que más de 1.600.000 españoles utilizaba de forma habitual Internet en 1998. Esta cifra aumentó de forma exponencial, y, como todos sabemos, hoy en día no concebimos un ordenador sin acceso inmediato a la Red. Por supuesto, Ethernet(en sus variantes 10Base-T, 100Base-T o Gigabit) pasó a ocupar un plano secundario para dejar lugar a las actuales conexiones inalámbricas, cuyos primeros prototipos 802.11b ya se podían ver en las páginas de PC Actual a principios de la década pasada.
El color llega con la intención de quedarse
La resolución de las tarjetas gráficas o la paleta de color podían verse como datos meramente anecdóticos, pues el estándar dominante en la mayoría de los equipos era EGA (16 colores), que fue sustituido por VGA (256 colores). Quienes deseaban utilizar sus PCs para tareas deCAD/CAM o DTP debían recurrir a costosas tarjetas gráficas dedicadas, como la Orchid ProDesigner.
Mientras que los equipos de Apple optaban por buses propietarios (de tipo NuBus) y sistemas de conexión de dispositivos flexibles, como SCSI, los PCs de la época continuaban debatiéndose ante el uso de buses AT de diferente «anchura» (de 8, 16 o 32 bits), que obligaban a los fabricantes a ofrecer todas las posibilidades en sus cajas, o bien la arquitectura Micro Channelde IBM. También tuvieron importancia los avances sobre el estándar EISA, que venía a paliar las deficiencias del bus ISA (de 16 bits), que era el utilizado habitualmente hasta entonces.
La eclosión de los clónicos
En 1995 comenzó a imponerse el bus PCI entre los equipos de altas prestaciones. Nada mejor para ilustrar el estado de la tecnología de los PCs en ese momento que retomar la comparativa de nada menos que 25 máquinas que PC Actual publicó ese mismo año, y en la que se alzó como vencedor un ordenador de Ahead: el modelo Pro Revolution. Este equipo incorporaba un microprocesador Pentium a 90 MHz de Intel, 8 Mbytes de RAM y un disco duro de 420 Mbytes. La tarjeta gráfica fue capaz de aprovechar las excelencias del bus PCI Quart X, con sus 2 Mbytes de RAM y una resolución de 1.280 x 1.024 puntos capaz de ofrecer millones de colores. Quedaban muy atrás los tiempos de las tarjetas gráficas con paletas limitadas, y fue posible construir aplicaciones más ricas, con lo que se vio beneficiada la industria del ocio.
El mes de diciembre de 1995 fue testigo de la llegada de los PCs de sexta generación, equipados con microprocesadores Pentium Pro, y optimizados para la ejecución de software de 32 bits. El siguiente hito importante se reflejó en las placas base, y lo propició Intel al desarrollar la especificación ATX 1.0, que fue revisada en 1996. Los cambios introducidos permitieron optimizar sensiblemente la ventilación, así como la logística de ampliación y la disposición de los conectores. Una de las primeras placas base ATX que llegó al mercado y que fue analizada en su momento por PC Actual fue la popular Thor. Obtuvo una alta valoración gracias a su elevada calidad.
Del Z80 de Zilog al Intel Core i7 Extreme Edition
La historia de los microprocesadores ha discurrido de la mano de los ordenadores personales, y propiciado su rapidísima evolución.
Algunos de los chips utilizados en las máquinas que reinaron en los 80 y 90 siguen siendo reverenciados por muchos entusiastas. En Internet podemos encontrar grupos de desarrollo que siguen programando para Z80 (Spectrum) y Motorola 68000 (Atari ST y Amiga 500), entre muchos otros.
El PC de nuestros días
Si bien actualmente la informática personal se está deslizando hacia el ámbito de la movilidad con las tabletas y los teléfonos inteligentes como principales exponentes, aún tendrán que pasar muchos años antes de que puedan sustituir por completo a los ordenadores personales. Será laminiaturización de los principales componentes, en combinación con la ubicuidad en el acceso a los datos, el fenómeno que provocará que el ordenador de los próximos años tienda aún más hacia sistemas portátiles frente a los equipos de sobremesa, que han ido perdiendo paulatinamente cuota de mercado.
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